Desde esta formación política, que además pide que se estudie el suelo de la parcela “con el fin de determinar si hay contaminación que pueda llegar a afectar a la salud de los vecinos”, aseguran que el edificio del IES “tiene un grave defecto de construcción al carecer de acometida al alcantarillado por lo que vierte sus aguas negras en un pozo ciego y al producirse precipitaciones las aguas salen a la superficie”, ha señalado Elena Garachana, portavoz de Vox, quien asegura que “durante 25 años, estos vertidos no han sido controlados por el Ayuntamiento conocedor de la situación”.
“La respuesta obtenida desde el Ayuntamiento es, cuanto menos, preocupante, ya que no encuentran el expediente, ni el proyecto del edificio, ni quién lo construyó, ni quién firmó la licencia, ni el contrato, ni nada”, ha afirmado Garachana. “Tenemos constancia de que se han presentado denuncias por parte de vecinos afectados y que se ha manifestado preocupación desde la Dirección del Instituto a la Comunidad de Madrid, que llegaron, incluso, a realizar obras en el 2022 para desviar las aguas hacia el alcantarillado, pero no solucionó el problema”.
“El Ayuntamiento tiene la competencia y responsabilidad sobre la red de alcantarillado, debiendo, por tanto, acometer la canalización acorde con la normativa vigente y evitando que continúen los vertidos en un centro escolar al que acuden cientos de niños todos los días y que afecta además a parcelas y parques públicos colindantes”, concluye la concejal.