»De manera personal, siento en el alma el fallecimiento de Javier Sánchez Rubio, perteneciente a una de las familias más arraigadas en Torrelodones y a la que me une, desde niño, gran amistad con muchos de sus integrantes.
Javier era un hombre bueno y gran amante de la naturaleza a la que dedicó desde su profesión de fotógrafo gran parte de su tiempo. Entre él y mi hermana llegó a existir una verdadera complicidad en tiempos difíciles para ambos, animándose mutuamente para vencer la enfermedad que, desgraciadamente, ha acabado con sus vidas.
Ya en sentido institucional y como concejal de Turismo del municipio debo expresar también el pesar por la pérdida de un extraordinario vecino, que siempre demostró un gran amor a su pueblo, colaborando fehacientemente con innumerables fotografías para el boletín municipal.
Es por eso, que, desde estas líneas, insto al Ayuntamiento a ofrecerle un gran homenaje institucional, distinguiéndole como ‘Hijo Adoptivo’, algo que creo, sería de merecida e innegable justicia y cuya propuesta presentaré próximamente para su aprobación en Pleno. Descanse en Paz.