La modificación puntual ampliará la edificabilidad en más de 40.000 metros cuadrados y Unidos por Hoyo lo califica como “pelotazo urbanístico de unos 20 millones de euros”.
Izquierda Unida señala que se trata de una operación urbanística y no de mejora de tráfico como se ha dicho, por lo que critica que “es impropio de una entidad educativa actuar de inmobiliaria, como ya lo intentó en 1998 con la complicidad del PP en el gobierno municipal”. Además advierten que no traerá ningún beneficio al municipio porque el acceso a la urbanización será por la A-6 pero sí costes al Ayuntamiento que será el que se encargue de sus viales, recogida de basuras o su seguridad. Sobre ésto apuntan que “ésto ha supuesto la ruina de muchos Ayuntamientos”.