El pasado domingo se concentraron una treintena de vecinos que estuvieron informando sobre la concesión “en plena campaña electoral” de la licencia de obras para la apertura de un negocio privado en una de las viviendas de esta Plaza. Esta protesta estuvo secundada por Izquierda Unida, Unidos por Hoyo y UPyD que denuncian “la mercantilización de la plaza además en beneficio de familiares del Alcalde en funciones”.
Además señalan que el equipo de gobierno está actuando en contra de la unanimidad en el Pleno donde se acordó solicitar la protección BIC de la Plaza y ninguneando la respuesta de la Subdirección General de Arquitectura y Edificación que recomiendan al Ayuntamiento que proteja a la Plaza de estas alteraciones.
Según el informe de la Comunidad de Madrid, este conjunto arquitectónico fue remodelado por última vez en los años 50 por la Dirección General de Regiones devastadas, y es uno de los escasos ejemplos de bienes protegibles del municipio. Estas doce viviendas son en origen de propiedad municipal hasta que la mayoría fueron suceptibles de permutas con algunos vecinos. La mayoría de ellos junto a casi trescientas firmas recogidas están “por la defensa del centro más emblemático de actividades sociales del pueblo”.
Videos, alevosía, denuncias y movilizaciones
Los convocantes de esta protesta denuncian que se estuvo grabando con cámaras a los allí concentrados y señalan que “en el número 11 donde se va a abrir el bar se había instalado una cámara medio oculta y familiares del alcalde en funciones también estuvieron grabando permanentemente”. Por ello declaran que “por consejo de la Policía municipal y la Guardia Civil, vamos a denunciar”. Usando altavoces, estos vecinos explicaron que con asesoramiento técnico presentaron alegaciones a la licencia del bar porque “no respeta la normativa urbanística municipal sobre el casco antiguo ni otras relacionadas con la altura exigida, la obra del sótano que es ilegal o la falta de acceso a personas en sillas de ruedas”. Protestaban diciendo que “todas las alegaciones fueron denegadas el 22 de Mayo, víspera de la jornada de reflexión”.
También han declarado que “en Hoyo muchos vecinos y comerciantes tienen miedo a manifestarse por las represalias que pueden sufrir por parte del Ayuntamiento”. Sin embargo advierten que seguiran con las movilizaciones, analizaran con abogados posibles delitos que han incurrido tanto la comisión del Gobierno como los servicios técnicos municipales en la concesión de la licencia y presentaran los correspondientes recursos de reposición y denuncias en el Tribunal contencioso administrativo.
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