En 2013, Galapagar implantó el sistema de recogida de residuos a través de contenedores soterrados, “un sistema más limpio, higiénico y libre de olores que tuvo gran acogida entre los vecinos”, que fue desechado en la anterior legislatura. “Lamentablemente, decidieron acabar con este sistema y, con un cerramiento provisional e improvisado de chapas sobre los contenedores, se clausuró de la noche a la mañana”, aseguran desde el Ejecutivo.
La reposición de este sistema de recogida “estará supeditado al estado real de las plataformas que durante estos últimos años no se han mantenido y se han dejado en total estado de abandono”, han señalado desde el Consistorio.
La concejal de Medio Ambiente, Paloma Lorenzo, ha denunciado que “los vecinos están pagando con sus impuestos la dejadez de los últimos cuatro años. Son millones de euros los que nos está costando poner en funcionamiento servicios que no han tenido ni un mínimo mantenimiento, ejemplo de ello es la carcoma del teatro Jacinto Benavente, las calderas oxidadas de la piscina cubierta o el sistema hidráulico de los contenedores soterrados que ahora tendremos que sustituir por completo”.
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