La viceconsejera de Sanidad del Ejecutivo autonómico, Laura Gutiérrez, ha destacado que el objetivo es alcanzar 3.500 donaciones, debido a que en la actualidad las reservas se encuentran en un 60 por ciento. “Lograr esta cifra permitiría recuperar los niveles para cubrir en condiciones óptimas la demanda diaria que se suministra a los centros sanitarios para intervenciones quirúrgicas y tratamientos”, ha incidido.
Por segundo año consecutivo, y tras el éxito cosechado en la pasada edición, el Gobierno regional incide en las necesidades de donación de plasma, que se utiliza para trasfusiones y con el que, además, se elaboran medicamentos para pacientes con diferentes patologías. Sólo en Madrid, 6.000 personas necesitan de estos fármacos derivados de este componente de la sangre para el tratamiento de su enfermedad. Para dar visibilidad a esta demanda, en la Real Casa de Correos se habilitará también un espacio con dos máquinas de plasmaféresis (para donaciones directas). Asimismo, se informará sobre este procedimiento y sus beneficios a todos aquellos que lo deseen.
En la zona Noroeste los vecinos pueden acudir a donar al Hospital Puerta de Hierro (Majadahonda); Hospital Universitario General de Villalba; Hospital El Escorial; y en el Hospital HM Torrelodones.
900 bolsas diarias
Para cubrir las necesidades hospitalarias de la región, en una situación normal se necesitan 900 bolsas de sangre diarias. Sin embargo, actualmente hacen falta 1.200 debido al descenso del 25 por ciento en Navidad. En la Comunidad de Madrid pueden llegar a transfundirse cada año cerca de 38.000 unidades en cirugías. En un trasplante de hígado se pueden llegar a utilizar entre 30 y 200, y en un tratamiento de leucemia hasta 250.
La sangre es un bien preciado que caduca y por eso es muy importante donar, al menos, dos veces al año. Los glóbulos rojos tienen una duración de 42 días y se conservan a 4º centígrados; el plasma se mantiene tres años y se guarda a -40º, y las plaquetas tienen una vida media de cinco a siete días fuera del cuerpo humano, con una temperatura de 22.
Dependiendo de la patología del paciente se le transfunden uno o más componentes sanguíneos, hematíes, plasma y plaquetas, por lo que una sola acción puede ayudar a mejorar o salvar la vida de tres personas.