Las obras, que durarán cinco meses, supondrán la completa remodelación de los parques de La Nava, Orodea y La Bomba, así como del situado en la carretera de Colmenarejo y el existente en la zona comercial próxima al Pabellón Municipal de Fiestas.
Los trabajos incluirán la mejora de los pavimentos en las áreas de juego para mayor protección en caso de caídas, el cambio de las instalaciones infantiles y deportivas por equipamiento más funcional y seguro, nuevo mobiliario urbano, incluyendo papeleras, bancos incluye y aparcamientos para bicicletas, y la renovación de la red de alumbrado en estos parques.
Asegura el alcalde, Santiago Villena, que “se ha querido destinar una partida tan elevada atendiendo a los objetivos del proyecto, de modo que haga viable la renovación que permita dotar de nuevas y más modernas instalaciones infantiles y deportivas y mejorar los pavimentos en las áreas de juegos para garantizar al máximo la seguridad de los menores, y que incluye, además nuevos vallados y mobiliario urbano, elementos novedosos, como aparcamientos para bicicletas”.
“Con su renovación integral estamos recuperando el uso de estos parques, potenciando su valor como lugares abiertos para el entretenimiento infantil y también agradables para al paseo y estancia de los mayores y de la población en general. En suma, se trata de motivar a nuestros vecinos para que, una vez rehabilitados, disfruten plenamente de unos espacios tan necesarios, y no sólo proporcionando un nuevo diseño y equipamientos, sino velando por el mantenimiento de todo ello”, ha indicado Villena, quien ha destacado que se zanja así el “retraso involuntario” sufrido por el proyecto.
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