Tras un largo proceso de gestión que se materializó en otoño de 2019 con la firma de un convenio entre el Ayuntamiento de Las Rozas y Adif, las obras para la canalización de la nueva líneas por debajo de las calles San Sebastián, Azalea, Acanto y camino del Apeadero se pusieron en marcha a mediados del año pasado y se han prolongado durante varios meses.
Estos trabajos han supuesto la creación de una nueva canalización que trascurre a aproximadamente 1,2 metros de profundidad y que tiene una longitud total de 2.003 metros. Una vez completada esta nueva instalación ha sido necesaria la realización, por parte de Adif, de las comprobaciones de funcionamiento necesarias antes de afrontar la desconexión de la línea eléctrica aérea y conectar el suministro a la nueva línea soterrada. Una vez ejecutado este cambio se ha podido entrar en la siguiente fase del proyecto, que supone el desmontaje completo de la antigua línea. Para ello se ha retirado primero el cableado, unos 1.500 metros de línea de alta tensión, y tras ello se está completando el desmontaje y retirada de las 11 torres que la sustentaban.
“Después de muchos esfuerzos por fin vemos culminada una obra compleja pero muy demandada por los vecinos y muy necesaria para la zona, que redundará en una profunda mejora del paisaje urbano y la accesibilidad de las aceras para la zona. Vamos a seguir ejecutando iniciativas de este tipo, que eliminen los cables aéreos de todas las calles de Las Rozas donde sea posible, y en definitiva, continúen mejorando la calidad de vida de los vecinos de Las Rozas”, ha indicado el alcalde de Las Rozas, José de la Uz, durante su visita a los trabajos de desmontaje de una de estas torres.
Los trabajos, que suponen una inversión total por parte del Consistorio de algo más de 900.000 euros, se completarán con el embellecimiento de las zonas donde se ubicaban las torres de alta tensión, en ocasiones pequeñas glorietas que ahora se eliminarán o aceras que serán renovadas.
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