Se trata de “contribuir a una mejor convivencia en el entorno escolar, atendiendo y dando respuesta a aquellas situaciones e incidencias que se producen, sobre todo, en los momentos de acceso y salida del alumnado de los centros educativos”, explican.
Uno de sus principales cometidos es vigilar los accesos a los centros educativos para garantizar la movilidad de peatones y vehículos y evitar accidentes. Los agentes se despliegan tanto en el turno de mañana como en el de tarde, atendiendo a las necesidades de cada centro debido a su ubicación, registro de demanda y contexto viario. No sólo atienden a la movilidad, los agentes también realizan acciones dirigidas a la prevención del absentismo, el acoso o las agresiones en el ámbito escolar.
Además, durante el curso escolar la Policía Local desarrolla diferentes acciones en los centros, incluyendo clases de Educación Vial, tanto teórica como práctica, formación en el buen uso de las redes sociales, servicio de agentes tutores, inspecciones y controles del transporte escolar, pacificación de la velocidad en las vías de los colegios, uso correcto de las plazas PMR, controles y dispositivos en evitación de consumos ilegales con la Unidad Canina, etcetera.
Para ello, la Policía Local cuenta con la colaboración de la comunidad educativa (centros, APAs, alumnado, etc.), con el fin de encontrar soluciones para asegurar la protección y convivencia de los escolares, para lo que ponen a su disposición el correo electrónico de la Jefatura de Policía Local [email protected].