Entre otras cosas, el Plan prevé que los centros sociosanitarios –en los que se vigilará especialmente su correcta climatización- reciban a diario información sobre el nivel de alerta por temperatura, para prestar especial atención a los residentes considerados de alto riesgo. Como complemento a los sistemas de climatización por frío en el interior de los edificios, se instalarán elementos de protección solar en los espacios abiertos.
Cuando se alcancen niveles de alerta medios o elevados, se aumentará la plantilla en aquellos hospitales o zonas de la región con mayor afectación, y se formará de manera específica al personal de Urgencias sobre cómo actuar ante esta coyuntura. También se identificará la necesidad de incremento de camas por servicios y se llevarán a cabo acciones concretas dirigidas a los grupos vulnerables, especialmente en centros de media y larga estancia. Se comunicará el alta hospitalaria a Atención Primaria para que realice el seguimiento telefónico de estas personas.
En Atención Primaria, además, se distribuirán documentos divulgativos con consejos preventivos. En el caso de los pacientes con enfermedades cardíacas, renales, diabetes, hipertensión, y otras patologías de carácter grave podrán recibir mensajes o notificaciones con recomendaciones y consejos ante cualquier síntoma relacionado con golpes de calor.
Por otra parte, el Servicio 012 ofrecerá a través de sus canales activos todo tipo de información asociada a estas situaciones y se difundirán campañas específicas mediante diferentes vías: teléfono, WhatsApp, correo electrónico, RRSS y vídeo-llamada.
Centros educativos
El Plan también prevé que los colegios e institutos puedan adaptar su horario lectivo a las circunstancias meteorológicas, incluso cambiar las actividades físicas y sus horas de realización, para evitar el ejercicio intenso y extremar las precauciones en las salidas al patio en las franjas más calurosas del día. Asimismo, se revisarán las tareas complementarias y extraescolares para evitar que se hagan en lugares expuestos al sol.
Se prevé la instalación de persianas, estores, toldos y otro tipo de apantallamientos para disminuir la temperatura e impedir que la radiación térmica llegue al trabajador, así como la entrega de vestuario ligero de verano de manera anticipada a los empleados cuyas funciones requieran su uso.
También se colocarán ventiladores, especialmente en colegios públicos con enseñanzas de 0 a 3 años y unidades enfriadoras en suelo radiante en algunas escuelas infantiles y se realizará una refrigeración por efecto vaporativo, regando durante la noche el suelo en patios y parques.
Transporte público
En el caso del transporte público, Metro reforzará las frecuencias para minimizar esperas en los andenes y vigilará especialmente la climatización de los trenes del suburbano y del resto de operadores del sistema con el objetivo de asegurar una correcta temperatura en su interior.
En los autobuses se recomendará comprobar de manera periódica los equipos de climatización a bordo de los vehículos. En paralelo, se está llevando a cabo un plan de intensificación de instalación de marquesinas en las paradas de autobús, pasando de instalar 30 a 48 cada mes.
Para los empleados públicos, cada centro de directivo atenderá a las recomendaciones generales y medidas preventivas sobre estrés térmico por calor de la Dirección General de Función Pública. En base a ello, aplicará una evaluación de los puestos con riesgo de su plantilla, tomando las medidas oportunas.
Por su parte, Canal de Isabel II continúa con sus campañas de concienciación ciudadana acerca de la necesidad de un uso racional del agua, que se refuerzan en momentos de alto consumo como es la época estival.