Cuando pisó por primera vez Hoyo de Manzanares, el municipio tenía apenas 600 habitantes. “No había casi de nada, ni calles asfaltadas, te puedes imaginar”, rememora para MasVive. “No había camión de basuras, había un autobús que subía y bajaba una vez al día y la plaza de toros estaba donde está la Plaza Mayor ahora”.
En la transformación de ese pequeño pueblo a lo que es Hoyo de Manzanares hoy, con 9.000 habitantes, contribuyó Jorge con su actividad. Fue concejal, primero por UCD y luego como independiente, en los primeros años de la Democracia, y también fue el primer pregonero de las fiestas de Hoyo tras el cambio de régimen. Ocupó las concejalías de Deportes, Hacienda, Sanidad… pero se le reconoce sobre todo por su labor en el ámbito deportivo. Fue entrenador del Club de Fútbol Hoyo de Manzanares, creador de los torneos veraniegos, de la prueba ciclista Rompepiernas, del Maratón Popular de la Peña El Botijo, de los torneos de tenis y de las escuelas de minibasket, además de cofundador de la Agrupación Deportiva de la Sierra, que se creó en un momento “en el que no teníamos nada, éramos pueblos pequeños. Me alegra muchísimo que haya continuado y me parece maravilloso que sea así”.
Profesionalmente se ha dedicado al marketing, la publicidad y la comunicación. Pero además de tener sus propias empresas, ha sido directivo y portavoz de la Real Federación Española de Fútbol y ha viajado con la Selección por todo el mundo, también fue directivo de la Federación Madrileña de Fútbol, así como de las federaciones de Baloncesto madrileña y española… Tiene la Medalla de Bronce al Mérito Deportivo, es Caballero de la Orden de Santiago y tiene la Medalla de Oro al Mérito Social Penitenciario por su trabajo de reinserción de presos a través del fútbol.
“En esta vida puedes tener dos tipos de titulaciones, las académicas y las sociales. Las académicas llegan porque estudias, te examinas y apruebas. Pero en las sociales nadie te dice qué tienes que hacer, lo haces porque te sale de dentro, porque quieres involucrarte en el pueblo en el que vives y porque quieres hacer cosas, no porque tengas ninguna intención de que se te reconozca. Jamás he hecho lo que he hecho en Hoyo de Manzanares esperando que me nombraran algo”, asegura.
Pero reconoce que se le ponen “los pelos de punta” pensando con emoción en el reconocimiento de ser Hijo Predilecto del municipio en el que residió tantos años. “Es un baño de cariño en Hoyo constantemente cada vez que voy. Jamás pensé que iba a recibir tanto cariño como me dan. Y según vas siendo mayor, le vas dando más importancia y te vas dando cuenta de que ha merecido la pena. Para mí esas muestras de cariño son impagables, estoy extremadamente agradecido y no quepo en mi de gozo por ello”.
Ahora reside en Segovia, pero tiene un hijo aún en Hoyo de Manzanares, y él no se pierde una fiesta. El año pasado le pudimos ver en la toma de posesión de la nueva Corporación, en el Pregón de Fiestas, este año estuvo en la Cabalgata recibiendo a los Reyes Magos… Y no para. Ahora se está involucrando con el Ayuntamiento de Segovia en la candidatura de la ciudad para ser Capital Europea del Deporte 2025. Y no olvida su iniciativa, que en su día no llegó a buen puerto pero que aún quiere sacar adelante, para que la UNESCO reconozca el fútbol como bien de interés social.
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