Los trabajos los está ejecutando la empresa Tragsa por encargo del Ayuntamiento de Valdemorillo y están destinados a la prevención de incendios forestales. Pero los vecinos de las urbanizaciones que rodean el barranco han denunciado el impacto que están teniendo en esta zona, un área de fuerte pendiente, repoblada con pino en la década de los años 60 y “sobre la que se ha recuperado un encinar mixto con gran diversidad de vegetación arbórea y arbustiva, además de un bosque galería en el arroyo”.
“El barranco constituye la zona verde de ambas urbanizaciones y su mantenimiento es competencia de las entidades urbanísticas colaboradoras de conservación. Sin embargo, el abandono durante décadas ha favorecido la densificación y deterioro del pinar. Además, tras el paso del temporal Filomena, se troncharon numerosos pinos y ramas sin que hasta la fecha se hubieran tomado medidas”, han explicado desde Ecologistas en Acción.
Alegando alto riesgo de incendios y falta de medios económicos, las entidades urbanísticas solicitaron al Ayuntamiento de Valdemorillo que retirase las ramas y árboles caídos y podase y aclarase el pinar. Sin embargo, a juicio de vecinos y organizaciones ecologistas “se trata de una actuación excesiva que está destruyendo una zona de bosque mediterráneo de gran valor y desarrollando actuaciones invasivas y perniciosas sobre el cauce del arroyo de San Juan”, han indicado.
“La actuación consiste en la apertura de pistas con maquinaria pesada que, al abrirse sobre zonas de gran pendiente, han alterado el perfil topográfico, generando desmontes y terraplenes, alguno de los cuales ha aterrado tramos del arroyo de San Juan que lleva agua durante todo el año. Algunas pistas van de una ladera a otra del barranco pasando por encima del cauce del arroyo. Se han talado, además de pinos, enebros, encinas, cornicabras y en el arroyo, sauces y fresnos (algunos de ellos centenarios), que crecían en el bosque de galería. En algunos tramos del arroyo se ha arrasado la orla arbustiva de zarzamoras, rosal silvestre y otras especies. Al eliminar la vegetación, que da sombra a la lámina de agua se producirá un incremento de temperatura”, denuncian las organizaciones ecologistas, que han reclamado a la Concejalía de Medio Ambiente y Mantenimiento Urbano del Ayuntamiento de Valdemorillo tener acceso al proyecto y la paralización de los trabajos y también han denunciado estas actuaciones ante la Confederación Hidrográfica del Tajo.
Una actuación pedida por los vecinos
Por su parte, desde el Ayuntamiento de Valdemorillo su alcalde, Santiago Villena, ha recordado que los vecinos llevan pidiendo mucho tiempo que se interviniera en el barranco de San Juan, dado el estado de abandono de esta zona natural. “Es una actuación necesaria que este Ayuntamiento ha acometido por responsabilidad ante la demanda planteada durante años por los vecinos de la zona y, curiosamente, por los mismos ecologistas que ahora critican esta actuación”, ha asegurado Villena.
Las actuaciones comenzaron en el mes de mayo y buscan “restar peligrosidad en caso de incendio” a la zona. Para ello, se cuenta con informes favorables “tanto de la Dirección General de Emergencias de la Comunidad de Madrid como la Confederación Hidrográfica del tajo, el SEPRONA y los propios servicios técnicos municipales”.
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