La accesibilidad como un derecho está recogida en la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad de 2006. Desde finales del año pasado, además, la accesibilidad cognitiva se ha incluido en la Ley General de los Derechos de las Personas con Discapacidad. Según la Organización Mundial de la Salud, trabajar en su mejora beneficia a 1 de cada 3 personas en el mundo.
¿Y en qué consiste? “Es la condición por la que todos los elementos que conforman nuestra vida, productos, servicios, transportes, contenidos textuales, vivienda, páginas webs, tecnología… son fáciles de entender, fáciles de utilizar y son comprensibles para todas las personas, incluidas aquellas que puedan tener dificultades de comprensión”, resume Óscar García Muñoz, responsable de accesibilidad cognitiva de Plena Inclusión Madrid.
Esta entidad se ha encargado, a través de su servicio ‘Adapta’, que emplea a personas con discapacidad intelectual como profesionales expertos en este ámbito, de hacer una evaluación completa del edificio de la Casa Consistorial y proponer diferentes soluciones a los problemas detectados.
¿Cómo se evalúa?
María Esteban, una de las evaluadoras que visitó el Ayuntamiento, explica a MasVive que trabajaron evaluando el entorno, las dificultades que hay para que uno se oriente tanto fuera como dentro del recinto, así como los espacios que hay en el edificio, planta por planta. La falta de pasamanos en las rampas, la elevada altura del mostrador de información, el color de las letras de la cartelería, la señalización o el hecho de que no se distinga bien la rotulación del Ayuntamiento desde la calle… son algunas de las deficiencias detectadas que se irán solucionando a partir de ahora.
María defiende que con su trabajo quieren garantizar la igualdad de todos los ciudadanos. “El problema es que la gente, a parte de que no sabe lo que es la accesibilidad cognitiva, porque no está informada, solo piensa en lo que ve. La accesibilidad tiene que ser para todos, no sólo para personas en silla de ruedas, o que no ven o no oyen… también para personas con discapacidad intelectual. Pero claro, eso no se ve. En la calle solo ves rampas, ascensores, semáforos con sonidos… ¿y a los demás, como les ayudamos? Si hablamos de discapacidad, hablamos de todos”, explica.
Desde el Ayuntamiento se han mostrado muy satisfechos por el resultado de esta experiencia. “Colaborar con Plena Inclusión es la mejor garantía para lograr que todas las personas con algún tipo de discapacidad intelectual o en su desarrollo encuentren unas instalaciones municipales perfectamente adaptadas”, ha señalado el alcalde, José de la Uz.
A partir de los informes recibidos, van a plantear varias actuaciones de mejora que serán a su vez evaluadas de nuevo por los profesionales de Plena inclusión Madrid. El Ayuntamiento tiene intención de extender este tipo de evaluaciones a otros edificios municipales, como el centro de Servicios Sociales, al tiempo que la Concejalía de Familia trabaja en un proyecto para facilitar la accesibilidad en ámbitos de lectura fácil y más comprensiva, como el servicio para adaptar a lectura fácil diferentes trámites municipales.
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