Gracias a la solidaridad de los vecinos de la localidad, que han donado cientos de juguetes, “ni un solo niño de la localidad se ha quedado sin su regalo”, explican los organizadores.
Juegos de mesa, muñecos, coches, peluches, casitas… Todos ellos han sido limpiados, desinfectados y empaquetados por los Jóvenes Dinamizadores para que los Reyes Magos pudieran repartirlos a los niños de familias con menos recursos durante la jornada más mágica del año.