Collado Villalba recibía, a comienzos del otoño, el legado del pintor villalbino Julián Redondo, fallecido en agosto del año pasado. Una cesión compuesta por un total de 57 obras, que quedarán expuestas de forma permanente en las paredes de la Casa de Cultura y que son un buen ejemplo del trabajo de este artista, muy querido en la localidad, a lo largo de toda su trayectoria artística.
Julián Redondo “nos dejó el año pasado demasiado pronto”, narraba el concejal de Cultura, José Colmenero, durante el Pleno en el que se dio cuenta del contenido del legado del artista. Lo definió como “un villalbino de los de antes”, un artista “autodidacta”, con el que “no iban mucho las reglas”.
Colmenero destacaba que “los que tuvimos la suerte de conocerle, sabíamos de sus manos prodigiosas, de la mirada tan especial con la que miraba rincones y paisajes de Collado Villalba” y su capacidad para utilizar diferentes técnicas. “Todo cabía en sus manos, plumillas, óleos, fotografías, postales…”, un hombre del Renacimiento que se atrevía con todo, desde los carteles a las escenografías totales y “un artista total” que destacaba por su humanidad, su compromiso y sus ansias de libertad.
El propio Colmenero recordaba durante el Pleno que Redondo era incapaz de cuantificar cuántas obras hizo a lo largo de su vida y dónde habían acabado muchas de ellas. Hay trabajos suyas en manos de particulares, empresas, entidades… y ahora también en la Casa de Cultura de Collado Villalba, un conjunto compuesto por obras elaboradas desde su juventud hasta los últimos años de su vida. Hay óleos, plumillas, grabados… algunos no se habían expuesto nunca y se pudieron ver, por primera vez, en la exposición-homenaje que se celebró en el Ateneo de Madrid en septiembre del año pasado.
“Quiso que parte de su obra quedara como legado para el pueblo de Collado Villalba. El 23 de septiembre se recibieron 57 obras del artista, que formarán parte del Patrimonio Cultural de Collado Villalba y colgarán de los muros de la Casa de Cultura”, señalaba Pepe Colmenero en el Pleno. Momentos después, su hermana Nati afirmaba ante los presentes sentirse “orgullosa de ser hermana de una persona buenísima, muy honrada, también del artista, pero sobre todo de la honradez, de la simpatía y de lo buena persona que era mi hermano”.
La hermana de Redondo quiso hacer un agradecimiento público a todas las personas que han hecho posible que este legado se quede en Collado Villalba y concluyó asegurando que se sentía “orgullosa de ser vecina de Collado Villalba”. También agradeció este legado la alcaldesa, Mariola Vargas, quien además recordó que la Sala de Exposiciones de la Casa de Cultura lleva, precisamente, el nombre de Julián Redondo. Allí realizó el artista su última exposición en la localidad en 2016.
Como homenaje a Julián Redondo, además, la Concejalía de Cultura ha convocado su primer Concurso de Dibujo Escolar, en el que podrán participar estudiantes del segundo ciclo de Primaria a los que se invita a interpretar el entorno urbano y natural de Collado Villalba. Tienen hasta el 5 de junio de 2020 para presentar sus trabajos, que se expondrán en la Casa de Cultura entre el 2 y el 17 de julio.
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