El pasado 15 de abril se pudo presenciar en Villanueva del Pardillo el tradicional oficio del esquileo, donde se corta el vellón o la lana a ovejas y corderos. El ayuntamiento de Villanueva del Pardillo apoya la estancia de un rebaño de 1.300 ovejas merinas que permanece entre los meses de octubre y junio para luego iniciar la trashumancia hacia lugares más frescos y donde hay pastos.
Para esta ocasión se pidieron voluntarios para pisar y compactar la lana en sacas de dos metros con 100 kilos de lana cada una. El presidente de la asociación del Consejo de la Mesta, Jesús Garzón, señala la gran apuesta desde 1993 por esta actividad. “Tratamos de mantener la economía verde y circular que ya se practicaba desde hace siglos. Estamos formando a jóvenes pastores para recuperar empleos que fijan la población en la ‘España vaciada’, como aportar enormes beneficios naturales, la fertilidad de los suelos, el carbono y la regulación del agua o la conservación de la biodiversidad. Así, el mantener la ganadería extensiva como una forma eficaz y a coste 0 de la prevención de incendios”.