anunciar que venía a ocupar la plaza de maestro.
Tras la guerra los niños habían tenido como maestro al párroco hasta que se ocuparon las plazas por los maestros nacionales. Ángel, que era entonces monaguillo, quiso ingresar pronto en el Seminario aunque por desavenencias lo abandonó. Aquí subraya que “fueron los únicos dos años que estuve separado de Don José”. Así que preparó el Bachillerato con ayuda del maestro e inició la carrera de Derecho. Su padre y el maestro eran íntimos amigos, y luego Ángel mantuvo la amistad con enorme fidelidad. Siempre le tuvo un gran respeto y le llamaba don José “porque a él le gustaba”. El maestro tuvo a Alberquilla como su asesor y recuerda que “tuve que aceptar con pudor porque él fue mi mentor” por lo que tuvieron además una relación especialmente estrecha. Incluso relata que “estuve presente en su operación de corazón para seguir a su lado por si no lo superaba”.
Herederos de su obra
Don José de Vicente Muñoz fue una figura muy querida y reconocida en Torrelodones. Su vocación fue especialmente generosa con la enseñanza a toda una generación y también por su afán de recopilar la historia de Torrelodones. Llegó a escribir cinco libros muy meticulosos: ‘Corografía de España’, publicado en 1950; ‘Escudo, geografía e historia de Torrelodones’ en 1980; ‘Álbum gráfico, histórico, cronológico, bibliográfico de Torrelodones’ en 1986; ‘Crónicas de Torrelodones y Comunidad de Madrid’ en 1990.
El libro que quedó sin publicar fue ‘Canto del Pico y Torrelodones, que fue un encargo en 1988 del propietario del Palacio, José Antonio Oyamburu, que prometió editarlo en varios idiomas para promocionar su proyecto de reabrir el Palacio como un hotel de lujo. Tenía dos años de autorización para publicarlo y se quedó sin editar.
Don José falleció en1992 pero este trabajo, junto a sus otros libros y obras pictóricas, fueron la herencia intelectual que ofrendó a la ‘Comisión de alumnos de Don José de Vicente Muñoz’ que previamente dispuso legalmente.
Legado a sus alumnos
El 10 de marzo de 1991 reunió para la firma y ordenó alfabeticamente a Ángel Alberquilla González como representante de los alumnos del pueblo, José Alberquilla Greciano por los alumnos de Galapagar, a José García del Pozo como compañero, compadre y amigo personal, a Jesús González Bravo y Jose Hernando Cuesta por los de La Colonia-Estación y a Manuel Ruiz Tarazona como representante de los alumnos privados. Les hizo herederos porque dice Alberquilla que “confiaba en que lucharíamos por su obra y nos quería agradecer los homenajes que le habíamos hecho”. Quería que tuvieran iguales derechos aunque el grupo nombró a Ángel Alberquilla como presidente de esta Comisión. Por petición de la Concejalía de Cultura, se le ha propuesto a esta comisión que las obras puedan ser digitalizadas y estén disponibles en la página web municipal -se calcula que despúes del verano- a lo cual todos respondieron que estaban de acuerdo. Alberquilla se siente aliviado porque dice que “le prometí a don José que publicaría su libro inédito sobre el Canto del Pico y de esta forma así se cumple su deseo”.
Si (
No(
