La Intervención Municipal ha concluido con la liquidación del presupuesto municipal del 2013 con un saldo positivo de 2,1 millones de euros. El equipo de gobierno anuncia que se han cumplido con los principios de estabilidad presupuestaria y regla de gasto— tal como exige la Ley Orgánica del 2012— gracias a la reducción de dos millones y medio que no se han gastado del presupuesto y el aumento de los derechos del Ayuntamiento en 300.000 euros.
Sin embargo, este superávit es contable porque no todo es “dinero real”, ya que es un derecho del Ayuntamiento (ingreso por impuestos, tributos, etc.) pero sin cobrar. De los 25,7 millones de euros previstos de ingresos, el gobierno informa que el remanente de Tesorería resultante de restar a los fondos “líquidos”, las obligaciones pendientes de pago, son de 474.506 euros. Aunque este remanente dicen que podrá ser empleado en el 2014 para la cancelación del endeudamiento municipal o para otras operaciones de gasto, explican que lo harán con “moderación y cautela para recuperar liquidez y mejorar el ritmo de pagos a proveedores cumpliendo con los periodos recogidos en la Ley del 2010 que establece medidas de lucha contra la morosidad en las operaciones comerciales”.