El atractivo principal de esta edición reside en su accesibilidad. A diferencia de las duras pruebas de montaña o las largas distancias, la organización ha diseñado un circuito urbano de 5 kilómetros que invita tanto a la élite local a buscar sus mejores marcas como al corredor popular a disfrutar del ambiente festivo.
La salida y la meta estarán situadas en la emblemática calle Real, el corazón comercial y social de Torrelodones, garantizando que el calor del público se sienta en cada zancada. El pistoletazo de salida para la categoría absoluta (mayores de 12 años) será a las 12.00 horas, un horario ideal para terminar la mañana deportiva con el aperitivo en los locales de la zona.
Antes de que los adultos tomen el asfalto, las futuras promesas del atletismo tendrán su momento de gloria. Desde las 11.00 horas se celebrarán las pruebas infantiles, divididas estratégicamente para fomentar la participación segura. Los corredores hasta 8 años correrán 300 metros y los de categoría alevín /infantil (9 a 11 años), 600 metros. La organización ha confirmado que todos los niños recibirán una medalla, un gesto que refuerza el mensaje de que el premio es el esfuerzo y la participación, más allá de la posición en meta.
Para los corredores de la prueba de 5 kilómetros, la competitividad está asegurada. La carrera premiará a los tres primeros clasificados de la general, pero también ha desglosado las categorías para reconocer el mérito en todas las edades, desde la Sub-20 (la fuerza de la juventud) hasta la categoría Veteranos (mayores de 50 años), pasando por los Sénior. Además, los trofeos son acumulables, lo que incentiva a los corredores más rápidos a pelear por todo.
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