En la actualidad, el servicio de autobuses interurbanos se presta a través de 36 contratos que finalizan el 1 de diciembre de 2024. “Esto representa una oportunidad única para su rediseño y mejor adaptación a las necesidades de casi 300 millones de usuarios”, ha asegurado el consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo.
Esta reorganización supondrá mejoras, destacan desde la Comunidad de Madrid, como la reducción de los tiempos de viaje, al incrementar líneas exprés en hora punta, o la disminución de pasajeros de pie en itinerarios largos para garantizar su seguridad y comodidad. Asimismo, se exigirá a todos los autobuses que dispongan de dos plazas fijas destinadas a personas con movilidad reducida y la incorporación de un espacio para portaequipajes en los vehículos urbanos e interurbanos.
Esta renovación contará con una inversión superior a los 7.000 millones de euros para los próximos diez años, convirtiéndose en uno de los contratos más importantes de Europa en esta materia.
Además, se contempla la aplicación de nuevos sistemas inteligentes de transporte como, por ejemplo, la ampliación de los medios de pago disponibles, permitiendo la validación con tarjeta bancaria. Se implantará, asimismo, el método tarifario de dos zonas, de tal modo que habrá una para la capital y otra para el resto de la región. Estas dos iniciativas podrán implementarse antes de la puesta en servicio de las nuevas concesiones.
Por otro lado, con el nuevo contrato se exigirá que el 85 por ciento de los autobuses dispongan de etiqueta medioambiental 0 o ECO al término del mismo, con el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero logrando un aire más limpio y seguro en la región. Además, se obligará a llevar a cabo renovaciones parciales de la flota para que los vehículos dispongan de las últimas novedades tecnológicas del mercado en materia de accesibilidad, seguridad y confort.