Explican en un comunicado que la inhalación de humos es la causa del 65 por ciento de las muertes en este tipo de accidentes en España. La Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid112 (ASEM) advierte de que una gran parte de estas víctimas se podrían evitar instalando detectores en los hogares, un elemento muy poco costoso, que reduce a la mitad la probabilidad de lesiones graves o mortales.
Sin embargo, en España, la implantación de estos dispositivos no llega ni al 10 por ciento de los hogares según datos de los fabricantes, mientras que en países como Francia, Alemania o Gran Bretaña este dispositivo es obligatorio.
El Servicio de Prevención de Incendios del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid ha lanzado un vídeo con consejos para prevenir los fuegos en viviendas. Su objetivo es sensibilizar a la población sobre la importancia de identificar los posibles riesgos que puedan presentarse en nuestro entorno y saber cómo evitarlos. Estos suelen encontrarse en el uso de chimeneas, estufas y braseros, campanas extractoras o conexiones eléctricas. También es importante saber cómo actuar en caso de emergencia.
En el video se fijan, además, una serie de conceptos básicos, entre ellos que el humo es el causante de la mayoría de las muertes en caso de incendio, por lo que es preciso cerrar las puertas para evitar su propagación. También advierte de que no se debe abandonar la vivienda si hay humo en la escalera del edificio, debiendo refugiarse en el hogar hasta la llegada de los bomberos.
Consejos para evitar incendios en las viviendas
Uno de los principales consejos es prestar atención a estufas, chimeneas y calderas, que deben encontrarse siempre en perfecto estado de funcionamiento y limpieza. También es necesario revisar las rejillas de ventilación, porque su mal estado podría provocar la acumulación monóxido de carbono, con el consiguiente peligro para la integridad física de las personas.
Otra medida importante viene determinada por la necesidad de no sobrecargar los enchufes con aparatos eléctricos. Además, con la llegada de las próximas fiestas navideñas, hay que extremar la precaución con velas y con otros elementos ornamentales que van conectados a la red eléctrica.
En caso de incendio, lo primero que hay que hacer es comprobar si el fuego afecta a una planta superior o inferior a la que ocupamos en ese momento. Si ocurre en una planta superior, debemos bajar a pie –si no hay humo en la escalera– y salir a la calle. Si está en la planta inferior, lo mejor es permanecer donde nos encontramos, colocar toallas y ropa húmeda bajo la puerta, para evitar la entrada de humo, y acercarnos a una ventana para que nos vean y puedan rescatarnos.
164 fallecidos en incendios en 2020
Un estudio de la Fundación Mapfre y la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos señala que en 2020 se registraron en España 164 fallecidos por incendio y explosión, cifra que se sitúa exactamente en la media de los últimos 10 años. De ellas, 119 tuvieron lugar en una vivienda, lo que representa un 73 por ciento del total, 11 de ellas en la Comunidad de Madrid.
Un año más el sector de población más afectado es el de los mayores de 64 años, con un 49 por ciento de los fallecidos. Las circunstancias en este colectivo vuelven a ser recurrentes: pérdida paulatina de sus capacidades motoras, progresivo incremento del número de personas que viven solas y malas costumbres de calefacción en muchas áreas rurales (braseros, estufas sin mantenimiento, chimeneas desprotegidas, aparatos eléctricos obsoletos…). Además, quienes viven solos tienen casi cinco veces más posibilidades de morir en un incidente de estas características que los acompañadas.
En los meses más fríos del año se concentra el 60 por ciento de los fallecidos, 99 víctimas, por lo que se debe continuar con campañas de prevención dirigidas al correcto uso y mantenimiento de los sistemas de calefacción en viviendas, así como el abandono de sistemas tradicionales, pero altamente peligrosos, como braseros o estufas antiguas.
Más peligro en los pisos
En las horas nocturnas el riesgo se eleva al estar las personas dormidas, la franja horaria más peligrosa es la madrugada avanzada, de 04:00 a 08:00 horas, donde se acumulan el 23,5 por ciento de las víctimas mortales en 2020, hasta un total de 28. Además, el porcentaje de afectados es mayor en las viviendas colectivas, 66 por ciento del total, lo que se explica por el hecho de que dos de cada tres españoles viven en un inmueble de estas características.
En 2020, es de nuevo la planta baja de las viviendas la que peores datos presenta, con 41 fallecidos, prácticamente la mitad del total registrado. De ellos, 31 corresponden a viviendas unifamiliares. Por tercer año consecutivo, el día de la semana con más víctimas mortales en vivienda es el sábado, con 23 fallecidos.
Las principales causas probables de los fuegos en viviendas con muertes en 2020 son fallos derivados del uso de la electricidad, con 23 muertos; seguidos por los productores de calor, con 11 víctimas, y nuevamente los muertos por cigarros mal apagados, 6 fallecidos.
El salón de la vivienda es la dependencia en la que se origina el mayor número de fuegos, con el 52,3 por ciento de los fallecidos, seguido por el dormitorio, el 23,3 por ciento y la cocina, con el 19,8 por ciento.
En relación con el índice de fallecidos por millón de habitantes, en el año 2020 la Comunidad de Madrid se situó en una ratio de 1,68 muertos por millón de habitantes, lo que la sitúa en el puesto número 12 entre todas las regiones.