“Hemos desarrollado un intenso trabajo para dotar a los espacios públicos de la localidad de este tipo de dispositivos, así como a gran parte de los vehículos de la Policía Local y SAMER-Protección Civil, porque la proximidad de un DESA cuando se produce un accidente cardiovascular es crucial para poder intervenir lo antes posible y por tanto salvar una vida o reducir de forma muy notable las consecuencias de una parada cardiaca.”, ha explicado De la Uz.
El municipio de Las Rozas se suma así a otras 14 ciudades españolas, como Murcia, Estepona o Alcalá de Henares, que ya cuentan con la certificación como Ciudad Cardioprotegida.
Las Rozas cuenta con 64 desfibriladores, instalados en los lugares públicos de la localidad más concurridos o con mayor tránsito de personas (28 equipos); en los vehículos municipales (27 desfibriladores portátiles); y en las instalaciones deportivas (9 desfibriladores). Esos equipos son aptos para su manejo por parte de personal no sanitario para dar cobertura a toda la ciudad, que tiene una ratio de un desfibrilador por cada 1.525 habitantes.