El Estudio Informativo del proyecto se puede consultar ya en la web municipal, www.torrelodones.es. En lo que afecta a Torrelodones, la actuación está comprendida en la cuadruplicación de la doble vía existente desde Pinar de Las Rozas hasta Collado Villalba. Desde este municipio a Alpedrete, por su parte, se pasará de una a dos vías. El proyecto prevé además, a lo largo de todo el recorrido entre Las Rozas y Alpedrete -22,151 kilómetros en total, algunas modificaciones de trazado, la remodelación de todas las estaciones de Cercanías, entre ellas la de Torrelodones y la instalación de pantallas acústicas en varios puntos del trazado. El presupuesto total de la obra supera los 429 millones de euros.
En el caso de Torrelodones, supondrá, según explica el concejal de Urbanismo, Santiago Fernández, que “prácticamente desde la calle Doctor Huertos hasta el puente del Gasco se van a ampliar las vías y se va a construir un falso túnel. Ahora mismo están en trincheras y abiertas y eso, por supuesto, va a quedar cubierto por el falso túnel de hormigón”. Eso va a suponer una “mejora” en cuanto a “ruidos y vibraciones”, reconoce el edil, pero saben positivamente que hasta llegar a eso “el proceso de las obras va a ser un proceso muy costoso y duro”.
En su momento, Torrelodones pidió a Fomento que, aprovechando estas actuaciones, se construyera un apeadero de trenes para dar servicio a la zona del Área Homogénea Sur, una propuesta que ha sido rechazada, aunque no tiran la toalla. “Vamos a tener una reunión a lo largo de este mes con el director general de Ferrocarriles, ya la hemos solicitado, y vamos a volver a solicitar la construcción de ese apeadero”, asegura Fernández. Parece difícil que vaya a ser aceptada la propuesta, “sabemos que es complicado, sobre todo por la distancia que hay entre Las Matas y Torrelodones”.
Pero más importante que eso, quieren transmitir a la Dirección General de Ferrocarriles su preocupación sobre cómo se van a ejecutar las obras. “Tenemos claro que las obras van a ser complicadas, porque las casas están muy pegadas al talud de la trinchera por donde van las vías, y allí hacer las voladuras va a ser muy complicado. Queremos transmitirles que se tienen que hacer con mucho cuidado”, concluye.