Memoria oriental fragmentada

Me he apropiado de esto y lo he hecho mío en mis vivencias y mi cultura”.

Es una obra que ha trabajado durante un año. Son fragmentos de su memoria, sentimientos y vivencias como su `ser mujer´. A través de dos técnicas en dos espacios aparece en una la litografía, donde el grabado está iluminado o sea estampado, y en el otro espacio, la técnica es la fotografía pintada, donde ella misma ha experimentado con el maquillaje, el vestuario para así identificarse con la obra. Ha contado con los fotógrafos Arturo Lescure, Juan Angel Tirado, Antonio Salvador Azorín y Javi Aguilera.

Penélope usa el blanco- que en Japón se usa para los funerales- con el negro-como el ying y el yang- y el rojo, y explica que “mi trabajo es sutil, intimista, con chorros de tinta con la fuerza del color. Me gustaría que a la gente le entusiasme, se recree y piense porque mediante el arte como medio libre expreso lo que de otra forma no sabría”.