Paqui Castro enseña música a bebés con el método Suzuki
miércoles 23 de abril de 2014, 12:06h
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La vida de nuestra vecina, Paqui Castro, música profesional tanto ella como su marido (Enrique Ferrández, violonchelista de la orquesta nacional) cambió cuando tuvieron su primer hijo, Pablo. Se propuso enseñarle desde sus primeros meses todo lo que sabía acerca de la música. Para ello, se inventó un cuento, “Viaje al país de la música” en el que dos niños, acompañados del mago diapasón y del hada armonía, van descubriendo lugares como el campo de la tonalidad, el bosque de las negras o el río de las blancas, hasta llegar al castillo melodía.
El método tuvo éxito, tanto con Pablo como con su segunda hija, Sara (ambos actualmente en la Escuela de Música Reina Sofía) y Paqui lleva ya 17 años dedicada a la enseñanza de la música a niños desde los 15 meses a los 6 años. Fue así como descubrió y empezó a trabajar con el método Suzuki, basado en el aprendizaje de la música como la lengua materna, enseñándoles a la vez que el habla la entonación, el ritmo, la afinación... Se trabaja el oído absoluto, haciendo que los alumnos a una temprana edad ya sean capaces de identificar las notas. “Con mi método”, comenta Paqui, “con 4 o 5 años los niños ya leen un pentagrama.”
Asegura que es un método que requiere de mucha implicación por parte de los padres, ya que las clases son sólo media hora a la semana, pero luego hay que trabajar con los niños en casa todos los días. Además de impartir clases en su casa, Paqui trabaja en una escuela Suzuki de reciente apertura en Galapagar.
Sobre los beneficios que la música aporta, ella lo tiene claro: “Estoy agradecida a la música por lo que me ha ayudado en mi vida.” Además de las ventajas obvias de potenciar el oído (bueno para el aprendizaje de idiomas) y del gusto por la música, ayuda a crear una disciplina, a fomentar la capacidad de trabajo, la perseverancia, la sensibilidad y la sociabilidad.