Una sociedad más igualitaria
miércoles 23 de abril de 2014, 12:06h
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¿Existe igualdad plena entre hombres y mujeres? En pleno siglo XXI podemos concluir que, por el momento y a pesar de que la sociedad ha avanzado mucho en muy poco tiempo, no. Y es curioso, porque si empezamos por hablar de los datos puramente demográficos, las mujeres son mayoría en la sociedad española y de Torrelodones. No es que la diferencia sea muy notable pero es así: hay más féminas y las estadísticas nos dicen que las mujeres viven más que los hombres. Pero esas mismas cifras también nos dicen que hay más mujeres que hombres en el paro, que hay más mujeres en situación de pobreza, y que en los últimos años se han perdido algunos avances sociales que costará años recuperar, algo que se hace especialmente dramático en el mercado laboral, donde todos los informes revelan que, a igual puesto de trabajo, cobran menos ellas que ellos.
Torrelodones puede presumir de tener una sociedad femenina fuerte, mujeres preparadas, jóvenes, perfectamente capaces de compatibilizar vida familiar y laboral, conscientes de su papel como impulsoras del progreso social, dispuestas a reclamar sus derechos y a participar en todo aquello que se les proponga. Una sociedad que poco a poco va eliminando diferencias.
Si hablamos de discriminación por razón de género podríamos concluir que ya no nos encontramos con situaciones en las que se produzcan discriminaciones evidentes por el mero hecho de ser mujer. Pero la desigualdad tiene muchas formas y muchas manifestaciones, algunas más sutiles que otras. ¿Cómo se corrige esto? Sobre todo con educación y con una firme apuesta por parte de las administraciones públicas, empezando por el Estado, para garantizar a las mujeres el pleno ejercicio de sus derechos y deberes en las mismas condiciones que los hombres.
Queda trabajo por hacer, lo sabemos. No queremos dejar de hablar de la educación, porque es fundamental. Deberíamos plantearnos, por ejemplo, qué falla cuando, al tiempo que se intensifican los programas con los menores para erradicar la violencia de género, todavía se escucha algún “algo habría hecho” en sus reflexiones. Es doloroso y descorazonador. Pero también sabemos que esto también cambiará, más pronto que tarde. Tenemos ante nosotros un futuro repleto de ciudadanos y ciudadanas firmemente dispuestos a convertir estas actitudes en algo del pasado.