Bailar por la esperanza en Uganda

Durante el curso, los asistentes conocieron la historia de Kabila, y de la asociación Kelele (“grita”) Africa, creada en Torrelodones. Hay personas que son desencadenantes de sorprendentes cambios en una realidad aparentemente inamovible y éstas son las coordenadas.

Kabila, a los 12 años sufrió cuatro años de maltrato en un orfanato, hasta que su vida cambia cuando hasta allí llegan unos "mzungus"(blancos) que buscan talentos en la música y la danza, “la música es mi alimento, está en mi”.

Eva Henrich, alemana afincada en Torrelodones, ha dejado de trabajar como modelo y ha hecho voluntariado en África. Su historia comienza en Kabalore, una de las zonas menos desarrolladas de Uganda y allí encuentra a la ONG RUIGO que quieren apostar por las mujeres que son el motor de su comunidad y necesitan un taller de costura. Eva reúne 3.000 euros comenzando con un mail a sus amigos y organiza un grupo de jóvenes y adultos para ir a implementar la escuela, la alimentación infantil y la ayuda sanitaria.

Kabila ahora es el coordinador de Kelele y lo recaudado en el taller y en un concierto en Madrid servirá para comprar zapatos a los niños o para pagar el sueldo de los profesores. Con un poco de aquí se hace mucho en Africa.

L.Oliveras