El riesgo de la diversión

Con el verano por fin llegan las vacaciones, el calor, la piscina, el descanso, los viajes, las terrazas, los paseos…por fin retomamos la vida social y nos cargamos de energía para el curso que viene. Pero cierto es que en todo este entorno de ocio, nos olvidamos de los riesgos que podemos correr a la hora de llevar acabo la famosa operación bikini, con los robos si nos vamos de vacaciones o con los incendios accidentales. Para este reportaje, ViveTorre y Hoyo ha contactado con los ‘profesionales del verano’ para que nos adviertan de los peligros de esta época del año.

Las dietas ‘frisbee’
Lo llaman ‘dietas milagro’ y lo que en realidad sería milagroso es no coger más kilos de los que pierdes en un principio. A mi me gusta llamarlo ‘dieta frisbee’, que tiras los kilos y cuando vuelven lo hacen con más fuerza. Muchos nos desesperamos por lucir buen cuerpo en el verano y pocos los que tenemos la fuerza de voluntad para ir al gimnasio meses antes o hacer una dieta equilibrada. Por eso, y muchas veces por desconocimiento, recurrimos a aquellas dietas que prometen una pérdida de peso rápida y con poco esfuerzo. Según la AEDN (Asociación Española de Dietistas Nutricionistas), el 95 por ciento de las personas que pierden peso con una ‘dieta milagro’ vuelve a recuperarlo. Según el especialista en nutrición del Hospital Madrid Torrelodones, Javier Martínez López, afortunadamente cada vez son menos los pacientes que buscan este tipo de dietas “porque conocen su ineficacia y peligros y acuden buscando buenos consejos de nutrición”. En el caso de los hombres, cada vez son más los casos entre jóvenes que llegan a la consulta de Javier con vigorexia.

Algunas de los peligros o consecuencias negativas para la salud de las dietas milagro, según Martínez López , van “desde una simple anemia o falta de energía a como ocurre en el caso de las dietas proteinadas estrictas de trastornos renales graves, problemas cardiacos y osteoporosis.

La única forma de perder peso de forma saludable y no años de salud y vida es ponerse en manos de un especialista que nos haga conseguir unos objetivos y nos eduque nutricionalmente para no recuperar los kilos perdidos. “La combinación de un programa de alimentación y deporte personalizado es fundamental si queremos perder peso en forma de grasa y no de masa muscular”, dice Javier. “El objetivo es modificar nuestra composición corporal y mantener a su vez nuestro patrimonio muscular, que mantiene nuestro metabolismo activo (quemaremos más calorías haciendo la misma actividad física cuanta más masa muscular tengamos) y nos protege de la obesidad”.

El sol, las quemaduras y la deshidratación
El sol es imprescindible para la vida y en relación al metabolismo humano estimula la formación de vitamina A y D. No obstante, si lo tomamos con exceso, la exposición a la luz solar natural o artificial puede ser muy dañina para la piel y acarrear consecuencias como la quemadura solar (de grado uno o dos con ampollas), el envejecimiento prematuro, las manchas o el cáncer de piel, y teniendo en cuenta que uno de cada tres cánceres es de piel, que el sol es la causa principal en el 90 por ciento de todos los casos de cáncer de piel y que en España se diagnostican aproximadamente 3200 nuevos casos al año, es para pensarse exponerse al sol sin la debida protección.

Maria Paz Pérez-Beato, dermatóloga del Hospital Madrid Torrelodones, nos cuenta que “la exposición a los rayos UVB y a los UVA desencadenan mutaciones a nivel genético de las células y modifican la membrana celular y el núcleo. Además, la intermitencia de las exposiciones, alternando la piel blanca en invierno y la piel bronceada en verano es un riesgo suplementario”. No debemos olvidarnos de la exposición en la infancia, pues según Pérez-Beato, “el 50 por ciento de las dosis acumuladas de rayos ultravioletas se han recibido antes de los 18 años”.

Si queremos evitar todas estas consecuencias, la doctora nos ofrece una serie de consejos: elegir el protector solar adecuado, en función del tipo de piel, del lugar de aplicación y de las condiciones ambientales (el índice de protección solar debe ser superior a 30), y verificar que protege también contra los rayos UVA; aplicar una buena cantidad de producto solar 30 minutos antes de tomar el sol sobre la piel seca; evitar exponerse al sol sin protección (aunque tengamos irradiación indirecta) aun en los días nublados; elegir una crema solar resistente al agua y renovar la aplicación de la crema cada dos horas. Hay que tener en cuenta también que el agua, la nieve y la arena actúan reflejando los rayos solares y aumentando su intensidad. “Debido a esto pueden producirse quemaduras incluso en la sombra”, afirma Maria Paz.

Pero si a pesar de todo, la quemadura aparece, es importante saber que el tratamiento solo ayuda a disminuir el dolor y las molestias pero no disminuye los riesgos de envejecimiento prematuro, cáncer ni otros problemas dermatológicos. Para disminuir los síntomas de las quemaduras se recomienda beber abundantes líquidos, tomar algún analgésico antiinflamatorio mientras la piel permanezca enrojecida; aplicar una crema humectante con frecuencia y en el caso de que se formen ampollas evitar reventarlas.

En la piscina
¿Y qué hacemos después de cultivar nuestro cuerpo y proteger nuestra piel?, pues ir a la piscina. Y es precisamente en este entorno donde los más pequeños más se divierten y hay que tener más cuidado. No hay que olvidar que el agua no es el medio natural de las personas, por lo tanto, padres y educadores deben conocer los riesgos que comportan las actividades acuáticas y tomar consciencia de la necesidad de adoptar medidas para evitar accidentes y explicarles a los niños los riegos de padecer traumatismos o lesiones medulares, así como las secuelas que éstas conllevan: paraplejías, tetraplejias, etc., si no obedecen las indicaciones de los mayores. También se recomienda indicar a los pequeños la necesidad de esperar un tiempo prudencial, después de comer, para irse a bañar, especialmente si el agua está muy fría.

Para todas estas recomendaciones hablamos con Francisco Lainez, coordinador de la piscina municipal cubierta del polideportivo de Torrelodones. Según Lainez, existen unas normas que regulan las condiciones higiénico-sanitarias de piscinas de uso colectivo. Entre ellas se encuentran “usar las duchas antes de bañarse en la piscina”, “no entrar con calzado de calle ni comer en la zona de playa”, y no acceder a la zona reservada de los bañistas si sufres alguna enfermedad contagiosa de transmisión hídrica o dérmica”. Además, en las piscinas climatizadas es obligatorio la utilización de gorro de baño y recomendable la utilización de gafas de baño.

En cuanto la seguridad y accidentes, Lainez hace hincapié en aspectos como “no realizar carreras ni empujones en las zonas de playa (riesgo de caídas), no lanzarse de cabeza en zonas poco profundas (riesgo de paraplejías), no dejar nunca que los niños se bañen solos (siempre bajo la supervisión de un adulto) ni siquiera en piscinas de poca profundidad, no hacer ahogadillas; no bañarse inmediatamente después de comer ni de exposiciones prolongadas al Sol; y tener cuidado con el exceso de confianza en los más pequeños”.

Según los psicólogos, lo más importante es que tanto los padres como los educadores tomen consciencia de que los pequeños siempre les pueden sorprender. Es decir, no partir de criterios como: ¡Todavía es muy pequeño, no te preocupes, no se moverá!.

Los cacos hacen su agosto
A la par, en los días de verano aparece el oportunista ladrón. Y es que son fechas en que los propietarios de las viviendas se lo ponen más fácil. Muchos cacos son extremadamente ágiles y no tienen problema en escalar hasta lo alto de una ventana. Se han visto incluso casos de ladrones que han entrado por una ventana abierta en un primer piso mientras los inquilinos veían la televisión tranquilamente en otra habitación aparte, con el sonido muy alto.

Por esta razón, antes de partir de viaje, sería conveniente hablar con un vecino de confianza para que coja la correspondencia o incluso aparque tu coche en alguna ocasión en la puerta de casa. La idea es que parezca que tu casa esté habitada, así que sería buena idea redireccionar las llamadas del teléfono fijo al móvil. No obstante, no olvides activar la alarma antes de irte.

La ‘luz’ de los bosques
Otra manera de disfrutar de los días de verano son las rutas en bici o a pie. En Torrelodones disfrutamos de un entorno privilegiado dada la proximidad a los terrenos forestales de los Parques Regionales de la Cuenca Alta del Manzanares y Media del Guadarrama. No en vano, el 82,18 % de nuestro término municipal corresponde a espacios naturales protegidos. Esta cercanía a la naturaleza ha sido aliciente para que cada vez más gente elija Torrelodones como lugar de residencia o, simplemente, para la realización de actividades de ocio y tiempo libre. No obstante, según explica Rubén Eguiluz Pascual, Jefe del Servicio de Protección Civil de Torrelodones, la proximidad a terrenos forestales, la denominada interfase urbano-forestal, también nos hace más vulnerables a riesgos como pueden ser los incendios forestales que, en la mayoría de los casos, “se inician por la negligencia en la utilización del fuego”.

El Plan de Protección Civil de Emergencia por Incendios Forestales en la Comunidad de Madrid (INFOMA), aprobado por Decreto 58/2009 de 4 de junio, enumeran en su Anexo 1 los municipios de nuestra comunidad autónoma con riesgo de incendio forestal, entre los que se encuentra Torrelodones.
“Para poder disfrutar de este gran recurso natural, afirma Eguiluz, también debemos responsabilizarnos de su mantenimiento y conservación, no sólo las Administraciones públicas sino los propios ciudadanos cumpliendo las normas reglamentarias relativas a la prevención de este tipo de incendios”.

Desde el Ayuntamiento, varios son los departamentos que se implican en eliminar o reducir este tipo de riesgo, entre los que hay que mencionar al Servicio de Medio Ambiente. Entre las labores de prevención que realizan, destacamos la prohibición del fuego para la quema de restos de vegetación o de cualquier otro tipo en terrenos no forestales como son las zonas urbanas y urbanizaciones; un programa de limpieza y desbroce de vegetación seca en los terrenos de titularidad municipal por parte del Consistorio; medios de extinción y logísticos del Servicio Municipal de Protección Civil, así como los propios del grupo de Colaboradores de Bomberos de la Comunidad de Madrid; y el recordatorio a los propietarios de solares de la obligación de la limpieza y desbroce de la vegetación existente en su interior, así como su posterior recogida y traslado hasta los puntos habilitados o, en su caso, depositarlos en bolsas para su recogida por el Servicio de limpieza.

La prevención es fundamental para evitar accidentes propios de esta época del año (vinculados con el ocio y, principalmente, con el agua y el sol). Disfrutemos de un verano con calor, salidas, viajes, fiestas y mucha alegría pero no olvidemos que la mayoría de los accidentes que hemos nombrado en el reportaje son evitables y que el ocio y el riesgo, van de la mano en verano.