“La subida de casos de COVID en el municipio ha obligado a esta medida, cuyo objetivo es evitar las aglomeraciones de público que se producen en estas actividades”, explican desde el Ayuntamiento.
Pequeños y mayores, que deberán usar mascarilla de forma obligatoria en todo momento, realizarán el recorrido en un sentido único y respetando la distancia social. Tanto el control de acceso a la Cabalgata como su desarrollo estará supervisado por un dispositivo en el que se integrarán Policía Local, Protección Civil y Servicios de Emergencias.
El cambio de formato de la Cabalgata se une a otras medidas ya anunciadas, como la suspensión de las fiestas preuvas en SORCAS y la Plaza de Toros, o el reparto del roscón y el chocolate postcabalgata.