Lars Wormer, política de juventud
miércoles 23 de abril de 2014, 12:06h
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Con el aspecto nórdico de este concejal socialista, el más joven del Ayuntamiento, nadie diría que es "torresano de pura cepa" pero, aunque su madre es noruega y su padre alemán, lleva los 24 años de su vida en nuestro pueblo al que, afirma, se siente muy vinculado.
Licenciado en Ciencias Ambientales, compagina desde hace un año sus estudios de doctorado con su trabajo de concejal, fiel a esas ganas de provocar cambios que le hicieron afiliase a las Juventudes Socialistas de Torrelodones hace ya seis años.
¿Qué queda de ese idealismo de las juventudes socialistas?
En aquella época nos juntamos un grupo de gente con buenas ideas y muchas ganas, y conseguimos muchas cosas. Ahora quiero pensar que sigo con el mismo espíritu. Quedan las ideas, pero es difícil que pasen a ser obras porque tenemos una política muy encorsetada, con muy poco margen para la innovación.
Como joven, ¿crees que hay pocas alternativas de ocio?
No es que haya pocas alternativas, es que no hay ninguna. Es un modelo de pueblo en el que es difícil que el joven se sienta identificado, lo que lleva a que no lo respete. Por eso vienen los problemas de vandalismo y demás, porque no se sienten responsables de su pueblo. ¿Qué soluciones se te ocurren?
En vez de hacer tanta política para jóvenes, hacer política de jóvenes, es decir, involucrar más a los jóvenes, dejarles que actúen. Hay que intentar ser menos tutores, menos paternalistas, darles una libertad, un espacio, unas herramientas para que se sienten responsables de lo que están haciendo.
Como vecino de Peñascales, ¿crees que hay abandono? ¿será recepcionada?
Creo que el abandono es el mismo que hay en La Berzosilla, Los Robles o cualquier urbanización periférica. Estoy convencido de que la recepción tiene que llegar, pero me preocupa en qué condiciones. Hay muchas zonas, las más cercanas al casco urbano, que ya se han recepcionado, pero deja mucho que desear. Cuando un Ayuntamiento recepciona tiene que tener la capacidad de asumir esa responsabilidad. Por otro lado, en zonas como El Monte, que es donde yo resido, hacen falta muchas obras para llegar al nivel exigido por la ley para ser recepcionado.
Como especialista en medio ambiente, ¿qué situación ecológica te parece la más grave actualmente?
Lo peor es el tema de la depuradora y que la red de saneamiento es terrible. Llevamos demasiados años haciendo vertidos directos al río Guadarrama, el cual está previsto que sea un parque nacional. Es cierto que la responsabilidad es del Canal de Isabel II, pero el Ayuntamiento no puede escudarse en eso, hace falta más presión. Es una agresión ecológica que no tiene igual en ninguna otra parte de la Comunidad de Madrid.
¿Y en el tema de urbanismo?
Lo más agravante es la recalificación del Área Homogénea Norte. Con las declaraciones que han hecho desde el Ayuntamiento de que es una zona que está degradada y van a hacer un campo de golf para salvarla, no sé de quién se quieren reír. No hay que ser especialista en medio ambiente para comprobar que es falso, sólo hace falta darse una vuelta por allí. Y, además del impacto medioambiental, está la excesiva cantidad de viviendas planeadas; si en el presente la red de saneamiento no funciona y las carreteras no dan abasto, a ver cómo el pueblo va a absorber otros cinco mil habitantes. Es insostenible.
Pronto nos vamos a quedar sin suelo urbanizable, ¿qué propuestas tienes para la financiación del Ayuntamiento?
Por un lado, una buena forma de ahorrar es no gastar innecesariamente. El Ayuntamiento está para dar servicio, no para promocionarse a sí mismo. Otras actuaciones serían por ejemplo no llevar a cabo el proyecto del aparcamiento de la calle Real, que va a ser una obra muy costosa y va a limitar ingresos para el Ayuntamiento en el futuro, ya que los ingresos irán a la empresa privada que lo va a construir.
¿Qué propondrías entonces para resolver el problema del aparcamiento?
El problema de aparcamiento es que las plazas se ocupan a primera hora por gente que coge el autobús. Lo que proponemos como principal medida es hacer un aparcamiento disuasorio en el antiguo vertedero que esté en buenas condiciones y con un acceso seguro, y hacer una modificación del trayecto del autobús para que haya ahí una parada. ¿Qué expectativas tienes para tu trayectoria política?
De momento me quedo aquí. Tenemos un equipo muy compenetrado y creo que estamos trabajando bien, entrando en una dinámica de crecimiento.