La joya de museo de la empresa familiar Julián de Castro- un autobús original con 100 años de historia de la Hispano Suiza- ha hecho “parada” en nuestro municipio este domingo 22 de diciembre, tras haber visitado Colmenarejo y Galapagar como parte de ese recorrido que realizaba antaño una vez al día.
Este autobús es un testimonio de cómo era la movilidad en la vida de nuestros pueblos. Contaba con asientos de primera, segunda y tercera clase, ésta última se acomodaba en el techo del bus. Entre otros detalles, se conserva la campanilla de mano que utilizaba el conductor para iniciar la marcha o la parada del bus que se producía a demanda y a pie de cuneta.
Para esta ocasión, estuvo junto a las autoridades del municipio Julián de Castro Sanz, el gerente de la empresa y el mayor de los ocho hermanos que han heredado el negocio y nos cuenta que en sus oficinas de Colmenarejo existe un pequeño museo con “la reproducción del despacho de mi padre con su mesa de trabajo, hay fotos, placas, billetes, cartillas de racionamiento, etcétera”.
Y hoy...los recortes
Atendiendo a la actualidad de nuestros días, con los recortes del servicio de transporte en los autobuses interurbanos, Julián dice que lo que lamenta es que no se ha transmitido bien y ha generado bastante caos en los pasajeros y que han notado “una bajada en la demanda”. Además una mala noticia para nuestra localidad: Julián nos cuenta que por iniciativa de los municipios de Colmenarejo y Galapagar van a proponer al Consorcio de Transportes cambiar el itinerario debido a la congestión que existe en Torrelodones y por el que sus vecinos se ven perjudicados. Y la propuesta que se está considerando es que la línea 631 no pase por el congestionado Torrelodones hasta que no se resuelva su problema circulatorio.