Guadarrama inaugura la exposición "Diurnes. Carpeta Picasso" de la Red Itiner.

Una muestra en la que se recoge el fruto de la colaboración entre Pablo Picasso (1881-1973) y el fotógrafo André Villers (1930). Y en la que se exponen litografías que ilustran los textos del poeta Jacques Prévert (1900-1977).

Una relación que surge cuando en 1947 Pablo Picasso se instala en la ciudad francesa de Vallauris. Durante su larga estancia en esta localidad próxima a la Costa Azul conoce de manera fortuita al fotógrafo André Villers. El artista, que contaba entonces con 72 años, y el joven fotógrafo, de 23 años, entablan una estrecha relación que trasciende el ámbito profesional para convertirse en una profunda amistad.

Fruto de esa colaboración surge la suite Diurnes, del latín diurnus –cotidiano–, elaborada en 1962 y editada con textos del poeta Jacques Prévert. El resultado es un conjunto de imágenes irreales captadas por la mirada entusiasta del joven André Villers y transformadas por la mano inquieta de un experimentado Pablo Picasso. En ellas se combinan las técnicas fotográficas con la superposición y aplicación de découpage (recortes de papel) para la creación de unos grabados que recrean todo el imaginario de la mitología picassiana.

La exposición consta de un total de 30 grabados. La realización de la carpeta Diurnes corrió a cargo del editor alemán Berggruen y se produjo en París con una tirada de mil ejemplares, en el año 1962.